Madrileny de naixement, català d’adopció i convicció

La frase d’aquí dalt és com es va definir Daniel de Alfonso a la Comissió Parlamentaria d’Assumptes Institucionals quan va comparèixer a donar explicacions per les filtracions a la premsa d’unes converses amb el ministre de l’Interior. La seva compareixença és una oda a la ironia fina a la qual deixa anar frases contundents entre subtilitats. Va explicar fets importants sense floritures, i mentre anava parlant, era cada cop més contundent contra els partits polítics. La transcripció són pàgines de fets explicats que, tot i no arribar als titulars, estan dites i registrades. Vull rescatar-ne uns quants fragments on fins i tot posava en entredit la integritat del PSC, CSQEP i C’s, entre altres envers les pràctiques polítiques que critiquen.

Poc després de començar a declarar,  va dir: “y, precisamente, por ser noble y conducirme con esa nobleza en este desgraciado suceso, por entregarme siempre a mi trabajo, por no ceder –que quede claro– jamás ante los no pocos –que quede claro también– intentos fallidos de torcer mi voluntad es por lo que ahora me encuentro ante ustedes, ante este Parlament y en estas circunstancias”. La pregunta que ens podríem fer és quins intents s’han dut a terme perquè l’Oficina Antifrau de Catalunya no fes la seva feina i qui n’ha estat responsable. Poc després, però, va afirmar amb rotunditat “algunos, incluso, de los que se han manifestado, están imputados ahora mismo. Otros han sido…, y no revelaré… puede que sean también investigados en este momento por la Oficina Antifraude de Cataluña”. Advertència clara: hi ha imputats que actualment estan sent investigats per la OAC.

Si seguim llegint, trobem “permítanme, digo, que les recomiende la lectura de lo que ayer publicaba un medio, que no diré cuál, pero lo podrán encontrar en su versión de internet, donde se me acusaba de conductas contrarias a la probidad, donde se publicaba una fotografía mía que nunca le he dado a nadie, que no he hecho pública, en un evento deportivo al que assistí”. Poc després arribem al punt d’inflexió de les seves declaracions, on canvia el to i passa de ser proper a marcar distància: “señoras y señores diputados, al menos habrán de coincidir conmigo en que no se pueden vulnerar derechos fundamentales de nadie y menos aún hacerlo bajo el amparo de otros derechos que le resulten más ventajosos al que vulnera. Eso, a mi juicio, se llama ‘manipulación de la información’, y ustedes lo saben todos muy bien. Eso, señoras y señores diputados, es hacer demagogia interesada”.

Més tard també va declarar “se filtran cosas, se vierten manifestaciones gratuitas, se crea, en definitiva, un estado de opinión y, de ese modo, se apunta con toda la artillería, cuando ya está armada, contra los intereses de los ciudadanos que pueblan Cataluña. Lo tienen que saber: se está atacando a la ciudadanía poniendo en juego la gestión de la oficina por parte de este director”. És cert que molts van declarar que havia de ser cessat sense escoltar l’altre costat i sense deixar que s’expliqués. També va respondre a les acusacions d’haver filtrat la converasa: “cuando mantengo reuniones de trabajo, privadas o institucionales, confío en los interlocutores. No desconfío del ministro, con estas palabras, pero sí les garantizo que este director ni ha grabado, ni sabía, ni ha permitido…, y entenderán ustedes –porque, si no, tendríamos que pensar que somos todos subnormales perdidos– que tampoco las he puesto en circulación”.

Després d’explicar que té l’agenda personal a disposició pública i que si es vol saber més de la Oficina Antifrau de Catalunya només cal reformar la llei, comença a carregar contra Ciudadanos i Inés Arrimadas. De Alfonso, després d’una discussió amb la diputada de C’s, va dir “`pues mire, el señor Albert Rivera a mí me vino a visitar al despacho, en mi oficina, me pidió árnica, me dijo que no me preocupara, que no tendríamos problemas, que me apoyarían en todo, cuando habíamos tenido discusiones aquí, pero que yo tenía que entender que también les tenía que dar alguna cosa. Lo puede negar. Claro, en este caso creo que no hay grabaciones. Perdón, yo lo he dicho bien claro […] y queda grabado. Si a usted le interesa más reírse que escuchar hágalo, es su problema”.

Després de C’s va respondre al grup parlamentari del PSC, que va preguntar a De Alfonso perquè no havia denunciat la gravació, a la qual cosa va respondre que no ho podia fer perquè no sabia qui ho havia fet. Va posar l’exemple de quan es va enfrontar a Manos Limpias: quan va saber qui era la persona exacta, va deixar les vacances per presentar una querella contra ella. Seguidament va criticar l’hipocresia del PSC a dos moments clau. El primer, “no sé qué pasaría si esas conversaciones se produjeran entre alguno de los que ahora me atacan a mí personalmente, que no he sido más que un interlocutor en esas conversaciones, como otras tantas veces… si eso le pasara a alguno de su grupo parlamentario. No lo sé. A lo mejor ahí sí que alegaríamos derecho de defensa, presunción de inocencia, vulneración de derechos fundamentales. Porque sepan ustedes unas cosas: esas pruebas, esas cintas son nulas, son ilícitas, son obtenidas delictivamente, y el uso que se hace de ellas, al dárselas a un medio de comunicación también es un delito”. Al segon moment va puntualitzar: “pero también me he reunido con gente del Partido Socialista de Cataluña, por supuesto que sí; si no pasa nada, y también he hablado de temas así, sensibles, claro que sí, no pasa nada”. La pregunta que ens hem de fer és quins són aquests temes sensibles, com també era sensible la conversa amb el ministre filtrada als mitjans.

Després va atacar a CSQP i al diputat Rabell: “señor Rabell, pues claro que sí, y de su grupo, pero no las voy a revelar, bueno, salvo que me diga usted: ‘Dígalas’, eso sí, si me autoriza. Yo no las voy a revelar jamás. Me han preguntado si voy a tirar de la manta. No tengo que tirar de la manta de nada. Perdó… no, no, no digo… pero no tengo que tirar de la manta de nada. Sí, y además, en este caso, incluso, como la llamada se hizo a mi teléfono móvil, pues, queda registrada, o sea, si es que es muy sencillo. Pero, señores, ¿ustedes de verdad piensan que yo, después de treinta –casi– años de ejercicio profesional, soy tan estúpido de caer en esas trampas? No, perdonen. Eso no. Pero así es como la oficina debe generar confianza, debe obtener información”. Això fa pensar… per què un diputat telefona al Director de l’Oficina Antifrau de Catalunya i no utilitza els canals establerts per demanar una reunió?

Va tornar a criticar CSQP per no preocupar-se que es filtrin converses entre alts responsables polítics: “la postura fácil es la de dimitir, señor Rabell. Yo lo entiendo, si yo lo entiendo, si yo sé que esto genera estupor, y a mí el primero, ¿eh? y a mí el primero, pero estupor no por las reuniones, que creo que a estas alturas cualquiera entenderá que las reuniones son más que naturales, ¿verdad?, y con todos. Lo que me genera estupor es que aparezcan publicadas sin que nadie se pronuncie sobre lo que eso supone; eso sí me genera estupor. […] No van esas reuniones, encaminadas a nada de eso; de verdad, señor Rabell. No van encaminadas… insisto, no hay un orden del día, nunca, con ningún grupo político. Me reúno y me imagino que me pueden hablar de muchas cosas, de algunas noticias de los medios, que me pueden dar información sobre algo que les ha llegado, sobre… bien, bien, pues, ya está. Siempre les digo lo mismo ¿eh?: ‘Por escrito. O me enviáis a quien os ha dado las pruebas o me dais los documentos, o, si lo tiene la policía, me la enviáis a mí, o, si no, yo no me mojo, ¿eh?’ Yo no me dejo utilizar; me habré dejado grabar pero utilizar, no”.

Després toca el rebre al Partit Popular: “mire, yo solo puedo decirle que si tuviera los medios para averiguar… porque los medios de la oficina –que nadie se engañe, ¿eh?– son justos; que nadie confunda un presupuesto de 4 millones y medio, 1 y medio más bajo de lo que tenía cuando yo llegué, que nadie se confunda, con 4 millones y medio, como tener medios ¿eh? que hemos tenido que soportar hasta las obras de rehabilitación de todo el edificio, porque, si no, la propiedad no nos lo hubiera alquilado: no tenía ni cédulas. O sea, el dinero se va por muchos lados pero no tengo ni medios, ni fondos reservados; no tengo el personal necesario en número. Si los tuviera y pudiera averiguar yo quién lo ha hecho, lo haría; espero que desde el ministerio lo hagan”.

Després del Partit Popular va passar a la CUP. Després d’explicar que només havia de retre comptes al Parlament, va declarar que s’havia reunit amb tots els grups parlamentaris tret de la CUP. “Me pueden decir ‘hombre, es negligente, reunirse; usted no tiene que reunirse.’ Se lo puedo admitir, a cualquiera le puedo admitir, pero lo que no es, en ningún caso, es un arma arrojadiza, porque con la práctica totalidad de los grupos –he de reconocer que con el suyo, no, a pesar de que he mantenido muy buenas relaciones en lo personal, pero nunca en privado con su antecesor–, me he reunido”. Després va afegir que van haver d’inspeccionar diversos cops casa seva i canviar-li el telèfon per seguretat. La seva resposta a Anna Gabriel, però, té un punt fonamental: “usted no está intentando sacar, con esto, rédito electoral”. La resta de grups, doncs, sí.

Pel que fa a Junts pel Sí, de Alfonso va respondre a les acusacions del diputat Bonvehí sobre reunir-se amb el ministre de l’Interior: “pero que es normal, señores, que nadie se escandalice, no sean hipócritas, me reúno con todos ustedes, y es que debo hacerlo, no hacerlo sí que sería negligente, eso sí que sería negligente”.

Després d’una pausa i de les repliques dels grups, de Alfonso va seguir la seva compareixença responent a tots els grups parlamentaris en una sola ponència. De fet, aquesta segona part és molt més contundent que la primera perquè alguns diputats li pregunten el mateix que havia respost a altres grups parlamentaris, a més de criticar el desgavell de les declaracions.

Sobre per què no ha recorregut ni s’ha querellat respon enfurismat “no hay más sordo que el que no quiere escuchar. Me han recriminado que por qué no voy a los tribunales. Ya lo he explicado. Yo, cuando he tenido que ir a los tribunales, he ido. He interrumpido mi periodo vacacional. He dejado a mi familia, he venido, me he preparado una querella y la he presentado, pero cuando tengo una persona a la que dirigir esa querella. Si fueran expertos, ustedes, o conocedores del derecho procesal penal, sabrían que una querella no puede presentarse si no hay autor conocido. Ya me gustaría –lo he dicho otra vez–, pero no tengo el autor conocido”.

Sobre el desgavell de les acusacions apuntala “ha cambiado todo, en esta mañana ha cambiado todo. Yo vine aquí, no voy a decir ‘acusado’ porque no sería correcto técnicamente, pero venía aquí habiéndoseme solicitado el cese por mantener reuniones con el ministro del Interior. Luego, cambia, y ya no es por las reuniones. Ahora resulta… o, en un momento posterior, resultó que era por el contenido de esas reuniones. Después, por el tono que se usa en esas reuniones. Sí, sí… Bueno, si está grabado –si está grabado–, si el ciudadano lo va a oír igual. Y ahora ya no es por eso, ahora es por la falta de ética”.

Va seguir criticant les acusacions, precs i supliques dels diputats: “yo les pido que lean detenidamente las causas de cese que vienen recogidas en el artículo 11, ¿eh? Se lo pido antes de que adopten ninguna resolución. Se me dice que tire de la manta. Pues mire, al mismo tiempo, se me dice que amenazo con tirar de la manta, que amenazo a los grupos… Yo no he amenazado a nadie, todo lo contrario. Mi tono vehemente ha sido para defender que la dignidad y la discrecionalidad con las que he actuado siempre no van a cambiar ahora. Es decir, que no se me pida una cosa y la contraria al mismo tiempo. No diga usted esto, y, al mismo tiempo, diga todo. No, no, no”.

Amb sorna, seguidament de Alfonso va declarar “ya empiezo a tener claro por qué no soy idóneo para dirigir la Oficina Antifraude de Cataluña: por el tono que he empleado al final de mi intervención. Eso también lo han dicho, aunque solo fuera por el tono. Literal: ‘Aunque solo sea por el tono final, usted no puede dirigir la Oficina Antifraude’”.

Tampoc es va estar de criticar la hipocresia d’alguna diputats: “tiene gracia que me digan: ‘Cuéntenos cómo ha sido’, ‘si usted es lo que ha hecho…¡, tal… ‘si usted hace esto, por qué se reunió, cómo lo hizo, por qué dijo esto…’, y al mismo tiempo digan ‘hombre, ahora que nos lo ha contado, ya no es usted idóneo, porque como ya se conocen sus técnicas de obtener la información…’ Bueno, señores, por favor –por favor”.

Després tot aquest recull de sentències i declaracions de Daniel de Alfonso a la Comissió Parlamentaria tinc la sensació que ens hem quedat només amb els titulars, amb la conversa entre ell i el ministre, i que no s’ha donat cap importància a la resta. El cert és, però, que després de llegir tota la compareixença i de fer un recull de cites interessants, potser sí que tenia raó quan deia que era incòmode però no per un sol grup sinó per la majoria. Per C’s perquè s’havia reunit amb Rivera, que li volia fer xantatge intercanviant protecció per informació; per CSQEP perquè alguns dels seus diputats el van trucar per telèfon personalment. Pel PSC perquè alguns dels seus integrants havien mantingut reunions molt semblants a les que de Alfonso tenia amb el ministre de l’Interior, per la PP per criticar la manca de recursos estatals suficients com per lluitar contra el frau a Catalunya; per Junts pel Sí el problema era el contingut de les gravacions filtrades i, per la CUP, haver traspassat clarament la legalitat.

Així doncs, la pregunta és si la seva destitució és a causa d’haver-se excedit en les seves funcions o si, en realitat, tot plegat s’assembla més a l’”Assassinat a l’Orient Express”, on tothom tenia algun motiu per voler treure’l del mig. El temps potser ens donarà la raó. De moment, ell duu avantatge perquè, com ja havia dit a la Comissió, les causes sobre les gravacions amb el ministre s’han arxivat.

En aquest enllaç podeu trobar la transcripció de tota la Comissió d’Assumptes Institucionals, amb la compareixença íntegra de Daniel de Alfonso.

Publicat a la Revista l’Endevant el 19 de desembre de 2016