Actualmente la Organización del Tratado del Atlántico Norte está en la palestra política y mediática debido a la acción de Estados-miembro en los conflictos de Siria o Ucrania.
Durante el S. XVIII, el Reino Unido conquistó gran parte del mundo a través de puntos clave de la geografía mundial. Estableciendo puertos y dársenas militares y comerciales en lugares como Gibraltar, Malta, Creta, Alejandría, Yedda, Calcuta, Sri Lanka o las Islas Falkland, dominaba las principales rutas marítimas. En el s. XX, durante la Guerra Fría, la Unión Soviética estableció en Tartus, República Árabe de Siria, una base militar para poder tener un puerto en el Mediterráneo y al mismo tiempo establecerse directamente como un actor en la región.
Actualmente, tal como teoriza Mary Kaldor, los conflictos han cambiado, y ya no se trata de conflictos Estado-Estado, sino conflictos de violencia organizada. Donde los actores implicados no están dentro de un Estado, sino que el conflicto existente trasciende más allá de las fronteras siendo la humanidad la verdadera víctima. Es por éste motivo que dentro de los territorios del Reino de España, el lugar idóneo para colocar un nuevo centro de la OTAN, es en las Islas Canarias, concretamente en la Isla de Fuerteventura. Más adelante detallaré las razones.
Como consecuencia de la guerra global contra el yihadismo, podemos encontrar en África Occidental el conflicto del norte de Mali contra Al-Qaeda, el conflicto contra Boko Haram en Nigeria, el Movimiento para la Unicidad y la Yihad en África Occidental (MOJWA) en el sur de Argelia, Mali y Níger, o Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) afectando toda África Occidental. Donde los Estados africanos afectados necesitan en muchos casos intervención extranjera, dado que estos grupos yihadistas cuentan con mejor preparación que algunos de los ejércitos nacionales. Dada la vinculación histórica de la zona de África Occidental con países miembros de la OTAN, como el Reino Unido y Francia, una base de esta organización en Canarias puede brindar el apoyo a los Gobiernos regionales contra el terrorismo. Un terrorismo que cada vez es más global, afectando más actores y que necesita rápidas intervenciones. Así pues, hay cinco puntos que justifican la decisión de poner un Cuartel General en Fuerteventura:
1. Existencia de infraestructuras militares en la isla.
2. Proximidad a zonas conflictivas.
3. Su situación estratégica.
4. La existencia de misiones policiales por parte del Cuerpo Nacional de
Policía en la zona del África Occidental.
5. El precedente portugués de Madeira.
El primer motivo por el cual el nuevo cuartel de la OTAN debería instalarse en Fuerteventura, es la actual existencia de bases militares en la isla tal como señala el Ministerio de Defensa. La primera de ellas es el Acuartelamiento “Puerto Rosario” del Regimiento de Infantería Ligera Soria 9, en Puerto Rosario, a menos de cuatro kilómetros del Aeropuerto de Fuerteventura. Un aeropuerto, que partiendo de las características del Aeropuerto de San Javier en Murcia, donde comparten su uso para misiones militares y vuelos civiles, serviría como infraestructura para poder recibir vuelos militares en caso de emergencia o rutina. Además, las características geográficas de la isla han permitido que se instale un radar militar en la Montaña La Muda, en la misma isla.
Estas peculiares características, mezcladas con los diferentes destacamentos militares que se encuentran en las Islas Canarias, hacen que Fuerteventura y Puerto Rosario sean un lugar preferente. La existencia de un puerto a escasa distancia del Acuartelamiento “Puerto Rosario” y su extensión, apuntan a la buena comunicación de un futuro Cuartel General de la OTAN en ese lugar. Así pues, dispondríamos de un puerto, un aeropuerto, un sistema de radares y la existencia de una infraestructura militar en dicho lugar.
El segundo motivo, citado anteriormente, es la proximidad a zonas de conflicto, pues la isla está situada en una posición privilegiada. Se encuentra a 100 km de la costa marroquí, 900 km de la capital de Marruecos, a 1.200 km de la capital de Mauritania, a 1.500 km de la capital del Senegal, 1.600 km del centro de Argelia, a 1.700 km del corazón de Mali, a 3.000 km del corazón de Nigeria y la frontera del Chad y 3.500 km de la frontera con Camerún. Como consecuencia del actual conflicto de Libia, los vuelos militares corren cierto peligro si sobrevuelan territorio hostil, es por esto que, aunque la distancia en algunos casos es más corta, los vuelos desde Fuerteventura serían más seguros. Dada su situación geográfica, las Armadas de los diferentes países de la OTAN podrían establecer en la isla un punto de ruta para aprovisionar sus buques rumbo al Golfo de Guinea o al Atlántico Sur.
El tercer motivo, vinculado a este último apunte, consiste en su posición estratégica cercana a África y también al paso entre continentes a través del Océano Atlántico, pues se pueden controlar las rutas que comunican el Mar Mediterráneo con América del Sur a través del Atlántico, donde se sitúan potencias como Brasil y Argentina. Así mismo la conexión entre los puertos del Golfo de Guinea y la Unión Europea hace de las Islas Canarias un punto clave, militarmente hablando, para controlar el comercio que pueda provenir de países conflictivos o de zonas en guerra.
El cuarto motivo está relacionado con la División de Cooperación Internacional (D.A.O). Actualmente el CNP ofrece apoyo para diferentes servicios en Argelia, Ghana, Guinea Bissau, Guinea Conakry, Guinea Ecuatorial, Mali, Mauritania, Níger, Nigeria, Senegal, Sierra Leona y Marruecos. Siendo así el establecimiento de un Cuartel General de la OTAN en Fuerteventura fundamental como labor logística de la EUROPOL y la INTERPOL en su lucha contra la criminalidad en estos países. De la misma que las acciones de la Guardia Civil en Mali, Senegal o la República Centroafricana. Además de misiones de apoyo a las operaciones francesas en Gabón.
Analizando el caso de Sierra Leona, situada a 2.300 km de Fuerteventura, la misión de la Policía Nacional ha sido investigar la delincuencia organizada en la capital del país. La misión policial consiste en controlar Freetown, la capital y dar apoyo a las Naciones Unidas contra los casos que puedan existir de narcotráfico y trata de personas. La misión de la Policía Nacional en la ciudad consiste en vigilar los puestos de recogida de agua, como también la asesorar a los funcionarios locales, coordinando la formación con otros policías y proporcionar asesoramiento técnico al respecto.
En el caso de Guinea Bissau, se presta apoyo a las autoridades del país para reformar las estructuras de seguridad, como también suprimir la trata de seres humanos y el tráfico de niños. Cabe destacar, que los motivos de criminalidad en el Sáhel consisten en el yihadismo, que se nutre en gran parte del mercado negro y de los beneficios de la trata de personas. Así pues, combatiendo estas acciones se combate también un problema global como es el islamismo radical.
El quinto y último motivo es la existencia del precedente portugués de Madeira, o la Base Aérea das Lajes (Base Aérea Nº4). En el pueblo de Lajes, de la isla Terceira del Archipiélago de las Azores, hay una base militar portuguesa construida a principios del s. XX, cuya función principal durante la Segunda Guerra Mundial fue la de servir como base tanto de la Royal Air Force, como de los Estados Unidos. Este hecho ayudó para que Portugal entrase en la OTAN, convirtiendo la Base Aérea das Lajes en un punto muy importante durante la Guerra Fría, pues servía de enclavamiento y parada de los aviones militares que iban de Europa a Estados Unidos, y viceversa, hasta la disolución de la Unión Soviética.
Como consecuencia de esas acciones, y analizados los cuatro puntos anteriores, un nuevo Cuartel General de la OTAN en Fuerteventura convertiría la isla y la infraestructura militar en un enclave óptimo para las nuevas operaciones africanas. Además, también serviría como sirvió en la Base Aérea das Lajes en las Islas Azores, para modernizar la infraestructura militar vigente en la isla y la mejora de las condiciones de vida de los ciudadanos del Archipiélago de las Islas Canarias.
Como conclusión, y por lo expuesto anteriormente podríamos afirmar que dentro del territorio nacional español, el mejor lugar para colocar un nuevo Cuartel General de la OTAN sería en la Isla de Fuerteventura por la proximidad a los conflictos, su situación de control de las rutas comerciales atlánticas, la importancia de situar una base logística en territorio de uno de los Estados de la OTAN lo más cerca posible de las nuevas guerras africanas y por la ya existencia de una infraestructura militar en la isla, sirviendo como base de transito temporal en caso de necesaria ampliación a largo plazo por movilización de contingentes a gran escala de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
Tarea: Máster en Seguridad – UNED.